Este breve artículo está basado en una propuesta de Chayanee Brooks del portal edutopia acerca del uso del lenguaje audiovisual en el desarrollo de las habilidades comunicativas de los alumnos pero, además, la hemos adaptado para que sea una guía a la hora de crear relatos de terror y misterio. En esta época llena de historias de espíritus, brujas y otros personajes fantásticos podemos aprovechar el fantasmagórico ambiente para que los alumnos desplieguen todas sus habilidades narrativas usando, no sólo el lenguaje escrito, que también será necesario pero, más que nada, su dominio de la narración audiovisual. Se divertirán creando una historia y compartiéndola por medio de videos espectrales.

 

 

El uso de la narración “digital” en la educación secundaria se ha convertido en una poderosa herramienta que permite a los estudiantes desarrollar habilidades de pensamiento crítico y literario en un formato que les es familiar: el video de formato corto. Al aprovechar este medio, los docentes pueden ayudar a los estudiantes a crear historias, incluso de terror, que no solo sean entretenidas, sino que también ayuden al desarrollo de la lectoescritura. Aquí te mostramos un proceso que aplica el enfoque de narrativa digital para crear una historia de terror en siete pasos, guiando a los estudiantes a explorar miedos, generar suspenso y desarrollar un mensaje visual impactante.

 

 

 

 

Paso 1: Definir el concepto central y tono

 

En la narrativa de terror, como en la formación literaria, la reflexión es fundamental. Los estudiantes deben pensar en un miedo específico, algo que sea inquietante para ellos, como la oscuridad, el aislamiento o lo desconocido. Para definir el tono, los estudiantes pueden preguntarse si desean contar una historia de horror psicológico, sobrenatural o un thriller sangriento. Este proceso de reflexión no solo establece el enfoque, sino que invita al estudiante a conectar con su propia percepción del miedo, un proceso similar al de reflexionar sobre temas personales en otras narrativas.


 

Paso 2: Crear el escenario con planificación visual y uso del B-roll

 

Para lograr una atmósfera visualmente atractiva y efectiva, la planificación visual juega un rol fundamental en la narrativa de terror. Aquí entra el concepto de B-roll, una técnica que utiliza metraje complementario para enriquecer el mensaje de la historia. Consiste en tomas adicionales que no siempre muestran al personaje principal en acción, sino que ayudan a construir el ambiente, mostrar detalles específicos y crear suspenso. Estas tomas complementarias pueden incluir planos de objetos (una ventana que se abre con el viento, un pasillo oscuro, sombras en movimiento), capturando el entorno en el que ocurre la historia y permitiendo que la audiencia perciba la atmósfera con más profundidad.

 

Para planificar estas tomas de B-roll, los estudiantes pueden realizar una presentación de diapositivas con diversos tipos de tomas: amplias para mostrar el escenario general, medias para centrar la atención en elementos clave del entorno, y de primer plano o primerísimo primer plano para detallar lo que puede estar oculto a simple vista, como una grieta en la pared o el sonido de pasos a lo lejos. Cada toma B-roll debe cumplir un propósito narrativo claro, contribuyendo a la atmósfera de terror al evocar sensaciones, detonar la imaginación del espectador y construir la tensión.

 

La presentación de diapositivas inicial permite que los estudiantes se familiaricen con los distintos encuadres y justifiquen cómo cada toma aporta a la narrativa. Esto no solo les da experiencia en planificación visual, sino que también los lleva a pensar críticamente sobre la construcción de suspenso y el lenguaje visual.


 

Paso 3: Desarrollar personajes empáticos y vulnerables

 

Para que el miedo sea efectivo, los personajes deben ser creíbles y empáticos. Al igual que en cualquier narrativa personal, en una historia de terror los personajes deben tener una razón clara para estar en ese escenario. Los estudiantes pueden crear un personaje con una debilidad específica o un temor personal, lo que incrementa la vulnerabilidad y el suspenso. Este desarrollo permite a los espectadores conectar emocionalmente con el personajee y ofrece a los estudiantes la oportunidad de explorar cómo el desarrollo de un personaje puede influir en la tensión de la historia.


 

Paso 4: Construir la tensión y utilizar el tono

 

La construcción de la tensión en una historia de terror digital es crucial. Los estudiantes deben comenzar con señales sutiles, como sonidos extraños o luces parpadeantes, y aumentar la frecuencia de estos eventos, introduciendo dudas en el protagonista. La elección del tono, incluida la iluminación, los sonidos ambientales y la música, puede intensificar la tensión y crear una conexión emocional entre la audiencia y la historia. Este enfoque en el tono permite a los estudiantes explorar cómo el estilo audiovisual puede cambiar la experiencia narrativa y ayuda a perfeccionar sus habilidades de comunicación.


 

Paso 5: Crear una amenaza o monstruo memorable

 

Un buen relato de terror necesita una amenaza memorable. Los estudiantes pueden diseñar una entidad física o sobrenatural con reglas o características específicas, como un espíritu que aparece solo en la oscuridad. Mantener un cierto misterio sobre la amenaza añade intriga y mantiene al espectador enganchado. Al igual que en cualquier narrativa, la clave es sugerir detalles sin mostrar todo, dejando elementos a la imaginación del espectador.


 

Paso 6: Dirigir la historia hacia el clímax

 

Para alcanzar el clímax, los estudiantes deben incrementar los riesgos y llevar al personaje a una situación desesperante o sin salida. Esta etapa culminante también requiere una planificación visual cuidadosa para garantizar que cada toma contribuya a la narrativa y refleje el conflicto central. Los estudiantes pueden recibir retroalimentación para mejorar sus decisiones en esta fase, afinando su habilidad para crear un suspenso efectivo.


 

Paso 7: Crear el desenlace y un último giro

 

Finalmente, la historia debe resolver el conflicto, aunque el desenlace no siempre tiene que ser feliz. Un giro final o una inquietud persistente puede ser eficaz para cerrar la historia, dejando una sensación de intriga. Este paso permite a los estudiantes aplicar habilidades narrativas y utilizar el formato audiovisual para impactar al espectador, a la vez que exploran cómo los elementos de conclusión y cierre pueden enriquecer su comprensión de la narrativa.


 

Paso 8: Revisión y mejora del producto final

 

Al igual que en cualquier proyecto de narrativa digital, es crucial revisar la historia, equilibrando las escenas de tensión y de calma para un flujo adecuado. Los estudiantes deben añadir detalles sensoriales —como olores, sonidos y visuales detallados— que transporten al espectador a la atmósfera de la historia. Esta revisión final es una oportunidad para corregir errores y asegurar que el terror crezca de forma progresiva y lógica.


 

Conclusión

 

Con este proceso paso a paso, los estudiantes pueden aprender a crear historias de terror impactantes y desarrollar habilidades de narrativa literaria, visual y pensamiento crítico. La narrativa digital de terror permite a los estudiantes experimentar y conectar sus propias emociones y experiencias con el medio audiovisual, ampliando sus capacidades en un formato actual y relevante.

 

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